martes, 30 de noviembre de 2010

3.548.108,60 € para la Restauración de hábitat para el urogallo en Asturias

BOE nº 272 de 10 de noviembre de 2010. Resolución de 22 de octubre de 2010, de la Dirección General de Medio Natural y Política Forestal, por la que se publica el Convenio de colaboración por el que se modifica el Convenio con la Comunidad Autónoma del Principado de Asturias, relativo a actuaciones de conservación en la Red Natura 2000.
Descargar Boletin: www.boe.es/boe/dias/2010/11/10/pdfs/BOE-A-2010-17325.pdf

viernes, 19 de noviembre de 2010

Sale a información pública el plan de conservación del urogallo en Aragón

El Boletín Oficial de Aragón publica hoy el texto del plan de conservación del urogallo, que estará a exposición pública durante un mes. El urogallo está incluido en el Catálogo de Especies Amenazadas de Aragón como especie "sensible a la alteración de su hábitat". Además, la subespecie pirenaica se encuentra en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas como vulnerable.

El Departamento de Medio Ambiente del Gobierno de Aragón comenzó en 2009 la elaboración del proyecto de Plan de conservación del hábitat para el urogallo, y durante todo este tiempo el documento se ha ido enriqueciendo con las aportaciones recibidas desde los sectores consultados, como son los municipios y comarcas con presencia de la especie, colectivos ecologistas, sociales y empresariales.
La última fase de la consulta para la elaboración de este plan se ha desarrollado durante este año, coincidiendo con la celebración del Año Internacional de la Biodiversidad.
El texto que hoy sale a información pública recoge las acciones básicas y necesarias para asegurar la conservación del urogallo en nuestra comunidad autónoma y recuperar una situación poblacional más favorable para su pervivencia a largo plazo.
Una de las novedades del plan es la necesidad de colaboración con sectores de la sociedad aragonesa para el desarrollo de algunas de las líneas de trabajo destinadas a mejorar las condiciones del hábitat forestal adecuadas para albergar urogallos.

Población y distribución
El urogallo es un ave emblemática de las montañas del norte de la península Ibérica, donde habitan dos subespecies diferentes: el pirenaico, Tetrao urogallus aquitanicus (Ingran, 1915), y el cantábrico, Tetrao urogallus cantabricus (Castroviejo, 1967). Durante las dos últimas décadas, las poblaciones ibéricas han sufrido un paulatino descenso y una reducción de su área de distribución. Este fenómeno se ha producido en toda su área de distribución mundial, pero la regresión más intensa ha tenido lugar en las poblaciones meridionales, especialmente en la Cordillera Cantábrica y Pirineos.

En Aragón, los estudios sobre el urogallo se remontan a principios de la década de 1970, si bien se intensificaron a partir de 2000 con el objetivo de evaluar el estado de las poblaciones.
La población pirenaica de urogallo se extiende por ambas vertientes del macizo, incluyendo territorio de España, Francia y Andorra.
En Aragón, el urogallo se distribuye por dos núcleos separados del área pirenaica: uno en la zona oriental, comarcas de Ribagorza y Sobrabe, y otro, mucho más pequeño, en los valles occidentales de la Jacetania. Ambos se encuentran separados por más de 70 km; ahora bien, en el primer caso existe posibilidad de relación hacia el este con la población catalana y en el segundo con la francesa situada al norte.
El núcleo occidental se encuentra en declive, con dos cantaderos en el año 2000 y solo uno a partir de ese año, por lo que su situación es extremadamente crítica. El núcleo oriental, más extenso y estable, comprende las cabeceras y los macizos meridionales próximos de las cuencas de los ríos Cinca, Ésera y Noguera-Ribagorzana. En la actualidad de estima que hay unos 100 ejemplares en toda la Comunidad.

Factores de declive
El declive del urogallo se debe a una combinación de factores, algunos son globales, como el cambio climático, y otros locales, como la fragmentación y modificación del hábitat, la incidencia de depredadores en el periodo de nidificación, algunas actividades humanas (elevada frecuentación, colisión con infraestructuras, furtivismo y proliferación de complejos invernales turísticos) o la baja tasa de reclutamiento juvenil entre otros.

Ver BOA (19/11/2010)

viernes, 5 de noviembre de 2010

Cantabria destinará 1 millón de euros hasta 2014 a recuperar el urogallo

Santander, 4 nov (EFE).- El Gobierno de Cantabria destinará en los próximos cuatro años un millón de euros al programa de conservación del urogallo y recuperación de su hábitat, dentro de las actividades que realiza en coordinación con las comunidades autónomas de Galicia, Asturias y Castilla y León.

Leer la noticia completa en el diario ABC

martes, 27 de julio de 2010

El urogallo, bajo tutela europea, con el objetivo de conservar esta especie

Un proyecto de 7 millones de euros para frenar la desaparición del ave, del que sólo quedan 500 parejas
21/07/2010 A.G.V - LEÓN

Desde el próximo mes de septiembre y hasta octubre de 2014 se desarrollará el Programa de acciones urgentes para la consevación del urogallo y su hábitat en la Cordillera Cantábrica , presentado ayer en Madrid, que cuenta como socios a las Comunidades Autónomas de Asturias, Galicia, Cantabria y Castilla y León, cuyo territorio conforma el hábitat de este ave. En el proyecto también participa la Fundación Biodiversidad y con el apoyo financiero de la Fundación Iberdrola. La directora de la Fundación Ana Leiva destacó, «la importancia de esta especie capaz de crear un efecto paraguas que facilita la conservación del resto de la fauna y la flora de su hábitat».

Para su conservación es fundamental la educación ambiental, la divulgación y la implicación social en la conservación de la especie, «sólo se conserva aquello que la sociedad quiere que se conserve», eran las palabras con las que sentenciaba José Felix García, director general de medioambiente de Asturias.
Su homólogo en la Junta de Castilla y León, Jose Ángel Arranz, ha recordado el éxito del programa de conservación del oso pardo y ha recalcado «la importancia de recuperar los lugares de apareamiento de los urogallos». En este sentido el programa, también pretende abrir claros en el bosque, ya que su suelo muy tupido, tampoco favorece a este ave. Una recuperación, que pese a la dicífil situación, requiere una actuación conjunta de los implicados en el proyecto para frenar la desaparición de esta especie emblemática de nuestra tierra.
«La situación requiere una gestión intensiva», tal y como apuntaba el presidente de SEO Birdlife, Eduardo Jana, a Efe, quien explicó que «será necesario reducir la competencia, cerrar algunas vías en las épocas de cría y conseguir multiplicar las arandaneras que proporcionan alimento». Un proyecto europeo que contará con una inversión de 7 millones de euros con el objetivo de «actuar junto a la población local y que esta sea consciente d elos retornos económicos, sociales y patrimoniales que la conservación genera», como afirmaba Josep Pexeu, secretario de Estado de medio Rural y Agua.

Segunda hornada de urogallos en Redes

El centro de cría en cautividad de Sobrescobio incrementa su censo con dos nuevos ejemplares traídos de León, que sobrevivieron tras la muerte de otros diez pollos de dos puestas diferentes

Rioseco, Elena PELÁEZ

(Dos polluelos de urogallo nacidos en junio del pasado año en el centro de cría en cautividad de Redes. Foto cedida por la consejería de medio ambiente)

El centro de cría en cautividad del urogallo cantábrico del parque de Redes tiene dos nuevos huéspedes. Tienen un mes y han nacido en las instalaciones ubicadas en el municipio de Sobrescobio. Los dos pollos de urogallo proceden de una hembra radiomarcada en León. Allí se recogió una puesta de cinco huevos, de los que, finalmente, sólo sobrevivieron dos.

Un año después de que viniesen al mundo los primeros cinco pollos de urogallo (de los que tres murieron), el nido artificial de Redes acogió el nacimiento de doce pollos. Sólo dos de ellos permanecen con vida. La unión de los dos urogallos que vieron la luz el pasado año en el centro de cría en cautividad de Redes dio como resultado diez huevos aunque ninguno sigue con vida. Tres de ellos no llegaron a eclosionar. Los otros siete nacieron pero murieron a los pocos días e incluso alguno en su primer día de vida con problemas locomotores, según aseguró la veterinaria del centro, María Suárez Álvarez.

La viabilidad de los pollos de las hembras primerizas es menor, apuntan desde el centro. Además, se debe tener en cuenta la temprana edad de los progenitores ya que estas aves, especialmente los machos, no suelen reproducirse en su primer año de vida. Es previsible, señalan, que en ejercicios posteriores la viabilidad sea mayor ya que esta ha sido «una puesta excepcional». La consejería de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio e Infraestructuras preveía recoger, en colaboración con la Junta de Castilla y León, durante las semanas siguientes al nacimiento de los diez huevos de la pareja criada en el centro, las puestas de cuatro hembras radiomarcadas en ambas regiones. Sólo se pudo retirar una de ellas ya que, debido a las intensas lluvias de mediados de junio, en los otros tres casos no se pudo seguir el plan previsto. «Teníamos previsto recoger en primer lugar la puesta de una hembra en Asturias, pero tras las lluvias había dejado de incubar los huevos», indicó la veterinaria.

Los cinco pollos procedentes de León fueron incubados «en las mismas condiciones» que los anteriores, destacó. A los once días de su nacimiento, los especialistas que se encargan de su cuidado detectaron «problemas de coordinación» junto a otros síntomas como anorexia. Se iniciaron entonces análisis para descubrir qué les pasaba a los recién nacidos. «Todo apunta a una infección vírica aunque estamos pendientes de los resultados», que acabó con la vida de tres de los cinco pollos, aseguró Suárez, que hace hincapié en que los dos tienen posibilidades de sobrevivir.

Ambos fueron sometidos a intensos cuidados, suministrándoles sueros y vitaminas. Los especialistas del centro de cría en cautividad de Sobrescobio estudian detenidamente a cada ejemplar y están atentos a cualquier cambio en su forma de actuar. El equipamiento tiene como objetivo la creación de una reserva genética de urogallo cantábrico y la cría de ejemplares en cautividad para su posterior reintroducción en su hábitat natural. El centro tiene capacidad para seis parejas reproductoras

La veterinaria considera que este proyecto, como todos los de cría en cautividad de especies protegidas, debe evaluarse a medio plazo. «Todo ha ido mejor de lo previsto. Para cumplir el objetivo de soltar ejemplares de urogallo cantábrico tienen que pasar años de trabajo y esfuerzo», subrayó.
La consejería de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio e Infraestructuras prevé que cuando el centro funcione a pleno rendimiento nazcan al año entre 36 y 48 ejemplares en cautividad. Los urogallos actuales formarán parte de una comunidad reproductora integrada por 18 ejemplares (doce machos y seis hembras) que se distribuirán en la media docena de jaulas de cría disponibles.

viernes, 11 de junio de 2010

La UE aprueba un plan de 7,3 millones para salvar al urogallo

El rescate «urgente» conllevará desbroces, corrección de tendidos eléctricos y eliminar a otros animales que le hacen competencia

GIJÓN. Bruselas envía refuerzos contra la desaparición del urogallo cantábrico. La Comisión Europea acaba de aprobar su participación en un proyecto que durante cuatro años aplicará medidas «urgentes» para preservar una subespecie catalogada «en peligro de extinción» desde 2005. El desembolso del plan alcanza los 7,3 millones, de los cuales 1,3 se destinarán íntegramente al territorio asturiano.

El 'Programa de acciones urgentes para la conservación del urogallo y su hábitat en la Cordillera Cantábrica' incluye soluciones extremas como la «reducción de las poblaciones de especies predadoras o competidoras, como el venado o el jabalí». Además, incluye desbroces, mejora de arandaneras y entra de lleno en el experimento que el Principado y Castilla y León iniciaron el pasado año con la captura de huevos desde los nidos leoneses para trasladarlos antes de su ecolosión a un centro de cría, en Muniellos. La idea era garantizar así una mínima reserva de ejemplares, dado que en el medio natural sólo sobreviven uno de cada tres polluelos. Sin embargo, dentro del proyecto oficial no ha sido capaz de mejorar ostensiblemente esa tasa, al fallecer tres de los cinco ejemplares criados en cautividad.

La experiencia sembró dudas sobre la viabilidad de esta intervención en el medio natural, pero ahora la Comisión ha decidido avalarla. Eso sí, el plan de Bruselas incluye la «posterior liberación» de las aves alimentadas en el centro de Muniellos. De esta forma rechaza la idea de que se convierta en «un zoo como el de Paca y Tola», como se temían algunos grupos ecologistas.

La intervención europea también incluye «programas de custodia del territorio», según informó ayer el Gobierno de Cantabria. Esta fórmula es la que ya aplica en Asturias la Fundación Oso Pardo (FOP) al hacerse con fincas y participaciones en bosques comunales en los que luego promueve actuaciones que beneficien a los vecinos y a la vez mejoren el hábitat de los osos.

La Comisión financiará estas acciones al 50%, mientras el resto del dinero saldrá de los gobiernos asturiano, cántabro, castellanoleonés y gallego. Iberdrola se ha unido como socio y pondrá 400.000 euros dentro de un paquete de medidas que contempla la «corrección de tendidos eléctricos».

viernes, 28 de mayo de 2010

El Principado de Asturias impide al FAPAS y a los vecinos de la parroquia de Páramo de Teverga trabajar en la recuperación del urogallo

Tras meses de haber solicitado permisos para la recuperación del hábitat del urogallo en el Concejo de Teverga, la Consejería de Medio Rural no autoriza los trabajos.

La recuperación del hábitat del urogallo es la clave para tratar de conseguir que esta especie no desparezca de las montañas asturianas. Desde el año pasado, la Parroquia Rural de Páramo de Teverga y el FAPAS, a través de un convenio de colaboración, pretender desarrollar actuaciones que mejoren la calidad del hábitat del urogallo.

El año pasado, se solicitaron los permisos para trabajar sobre una superficie de 50 hectáreas de terrenos, con el fin de recuperar las arandaneras, la planta que resulta estratégica en los trabajos de protección del urogallo. Sin embargo, no ha habido ninguna respuesta a la solicitud por parte de la Consejería de Medio Rural del Principado de Asturias.

Asturias posee un Plan de Recuperación del Urogallo que establece como actuación prioritaria la recuperación del hábitat de esta especie que se encuentran en máximo peligro de extinción. Resulta contradictorio que la propia Administración Regional impida la realización de trabajos de conservación.

Los montes de la Parroquia de Páramo de Teverga, fueron hasta hace unos años, territorios ocupados por una buena población de urogallos, sin embargo, a lo largo de la última década, la población ha decrecido alarmantemente, hasta el punto de encontrarse en una situación crítica.

El FAPAS en colaboración con los vecinos de la Parroquia Rural y el apoyo de la Fundación Biodiversidad y el Ministerio de Medioambiente del Gobierno de España, ha puesto en marcha varias iniciativas para trabajar en la conservación de la biodiversidad en este territorio cuyo objetivo es recuperar al urogallo ya que en los trabajos de control de la especie, el año pasado el FAPAS sólamente ha podido localizar un ejemplar hembra.

En esta primavera, han comenzado a buscarse indicios de los urogallos que aún puedan sobrevivir, pero hasta el momento, los trabajos de campo han dado un resultado negativo, pues no ha podido ser localizado ningún ejemplar.

‘Recuperar las arandaneras, una estrategia clave en la conservación del urogallo’: Así quedó de manifiesto en el Seminario de Gestión Forestal y Manejo del Hábitat del Urogallo, Somiedo 2004, donde se recogió la necesidad de condicionar este tipo de terrenos al aclareo mediante el desbroce selectivo y manual del matorral de piorno y erica para favorecer la estructura de las arandaneras, consiguiendo como indicador de calidad de las mismas, que la planta de arándano alcance una altura óptima de 50 centímetros.

Las solicitudes de trabajo para la recuperación de las arandaneras en la cuenca del Puerto de Ventana en Asturias no han sido atendidas por la Consejería de Medio Rural, ni tampoco las solicitudes de plantación de árboles productores de frutos silvestres, otra línea de trabajo que se considera de gran importancia para la alimentación de los urogallos.

Según todos los expertos consultados, el urogallo se encuentra en una situación límite, donde el proceso de extinción solo podrá ser evitado si se comienzan a desarrollar trabajos de conservación del hábitat.

Resulta insólito que la Administración Regional de Asturias niegue la ejecución de actuaciones que impidan la extinción del urogallo, máxime cuando dichos trabajos cuentan con un importante apoyo institucional por parte del Gobierno de España y son los propios vecinos del territorio quienes lo demandan.

Más información:  http://www.fapas.es/

martes, 18 de mayo de 2010

El urogallo, una especie en peligro de extinción

El urogallo (Tetrao urogallus) es una especie de ave galliforme de la familia Phasianidae. Se distribuye por buena parte de la Europa boreal (Escandinavia, región del Báltico y Rusia.) y en pequeños enclaves de montaña de zonas templadas como la Cornisa Cantábrica, los Pirineos, los Alpes y el Jura.

Biológicamente se la considera una reliquia de la era glaciar,[cita requerida] pues tras este período la población se fue aislando en Europa a las regiones de alta montaña y o más frías.

En España y desde 1979 se ha vedado la caza de esta especie, y desde 1986 tiene la catalogación de especie protegida aunque esto no ha supuesto un incremento en la población hasta el momento.

1 Descripción
El urogallo tiene un tamaño máximo de 1,10 m en los machos y 0,70 m las hembras. Se caracteriza por tener unas plumas debajo del pico en forma de barba, una cola en forma de abanico y unos tubérculos rojos sobre los ojos.

2 Hábitat
Vive en zonas montañosas con bosques claros y abiertos de coníferas donde haya abundante vegetación herbácea, agua y bayas. Suele dormir en las ramas horizontales de los árboles, lo que se hace un requisito para su presencia.

3 Reproducción
El urogallo se caracteriza porque tiene una dieta estacional, que corresponde a:
En primavera se alimenta de brotes de haya y otras especies herbáceas.
En verano, se alimenta de hierba, crisálidas de hormiga, bellotas, hayas, lagartijas e incluso serpientes.
En otoño la alimentación principal es el arándano.
En invierno, se alimenta de diferetes especies de brotes de árboles: de haya, amentos de abedul, acículas de pino y hojas de acebo.

4 Amenazas a la especie
La época de celo dura desde marzo hasta el primer tercio de mayo. El urogallo profiere gritos de reclamo al amanecer y al atardecer desde algún punto elevado atrayendo a las gallinas; estos gritos le dieron este nombre al animal pues se decía que eran parecidos a los del uro (bóvido extinto). Luego se posa en el suelo y cubriendo un territorio de 50 o 100 m de diámetro continúa con sus reclamos y copulando con varias gallinas en un mismo día.

Las gallinas ponen entre cinco y doce huevos en un hoyo en el suelo donde son objetivo fácil para el jabalí, los perros, comadrejas y el azor. Además la mortandad de los polluelos es muy alta en las primeras semanas de vida, por lo que su población aumenta muy lentamente.
Hembra.Si bien el urogallo está protegido desde 1986 en toda España, su población ha ido disminuyendo poco a poco desde entonces hasta niveles alarmantes.[1] Aunque la caza furtiva es cada vez más perseguida y causas menos daños, es la destrucción o alteración del hábitat natural del urogallo lo que provoca su desaparición:

Deforestación: provoca la escasez de los árboles de los que se alimenta y donde vive.

Actividades humanas: ganadería, cacerías de otras especies como el jabalí o actividades deportivas como el senderismo, esquí o el alpinismo alteran la tranquilidad que requiere el urogallo para su reproducción en la época de celo, además de que modifican su entorno natural mediante pistas forestales, sendas artificiales o instalaciones deportivas.

Urbanismo: los vuelos del urogallo son muy cortos y a baja altura posándose cada cierta distancia en las ramas. Una simple valla, un cable de alta tensión o el despeje de una zona para zona de pastos impedirán gravemente su desplazamiento y, por lo tanto, su capacidad reproductora.
Modo de reproducción: el macho emite durante el celo una especie de grito al amanecer y al atardecer que requiere la no interferencia de actividades humanas. Igualmente el modo de puesta de huevos da pocos polluelos viables.

De las subespecies peninsulares es el urogallo cantábrico (T. u. cantabricus) la que tiene las peores perspectivas de futuro a medio plazo pues sus poblaciones comienzan a estar aisladas entre sí sin posibilidad de renovación genética. La población de urogallos en Galicia se considera prácticamente extinguida dado que está aislada del resto. En Cantabria quedan unas pocas parejas en el entorno de Picos de Europa de viabilidad muy dudosa. En Asturias y León las poblaciones empiezan a estar desconectadas y a perder capacidad reproductiva. Se han propuesto diversos planes de actuación pero todos con poco o nulo éxito. La reciente declaración de parte de la Cordillera Cantábrica como Reserva de la biosfera puede suponer un pequeño salvavidas. Otros planes han propuesto su cría en cautividad y el cruce genético forzado entre ejemplares de distintas poblaciones.

5 Taxonomía

Tiene descritas numerosas subespecies, aunque las fuentes divergen en su número, unas soteniendo nueve,[2] y otras doce.[3]

T. u. aquitanicus Ingram, 1915 - Pirineos
T. u. cantabricus Castroviejo, 1967 - Cordillera Cantábrica
T. u. major C. L. Brehm, 1831 - Alemania hasta el sureste de los Países Bálticos y Península Balcánica.
T. u. rudolfi Dombrowski, 1912 - Montes Cárpatos y montañas Ródope.
T. u. taczanowskii (Stejneger, 1885) - Siberia central hasta los montes Altai y el noroeste de Mongolia.
T. u. uralensis Menzbier, 1887 - Sur de los montes Urales y suroeste de Siberia.
T. u. urogallus Linnaeus, 1758 - Escandinavia
T. u. volgensis Buturlin, 1907 - Centro y sureste de Rusia.
T. u. kureikensis Buturlin, 1927[2]
T. u. lonnbergi - Península de Kola[3]
T. u. karelicus - Finlandia y Carelia[3]
T. u. pleskei - Bielorrusia, norte de Ucrania y Rusia europea.[3]
T. u. obsoletus - Norte de Rusia y norte de Siberia hasta los tramos altos del río Lena.[3]